Las dos agrupaciones parroquiales de “La Borriquita” procesionarían por la calles de sus respectivos municipios en la tarde del Sábado Santo.
Otra Semana Santa más, los pueblos de la Vega del Guadalquivir se quedan sin ver a sus hermandades y devociones realizando sus Estaciones de Penitencia. En la tarde del Sábado Santo, serían las dos agrupaciones de “La Borroquita” de Cantillana y Peñaflor las que servirían de antesala a la Semana de Pasión en la Vega del Guadalquivir.
“La Borriquita» en Cantillana
Fundada en los albores del siglo XXI, la Agrupación Parroquial de la Sagrada Entrada de Nuestro Señor Jesucristo, ha ideado para este año la veneración a su Imagen Titular, con el objetivo de que sus fieles y todos los vecinos de Cantillana puedan acudir a verle y rezarle en este Sábado de Pasión. La Agrupación Parroquial ha montado la escena del misterio en el altar de la Iglesia de la Misericordia, su sede canónica, con el objetivo de “transmitir el más parecido sentimiento, ese sentimiento tan alegre que el misterio hace sentir a cada uno de sus hermanos y fieles devotos cuando el Señor de la Sagrada Entrada en Jerusalén discurre por las calles de Cantillana”, según recoge el portal cofrade de Cantillana, Passio Naevensis.
La Agrupación Parroquial de “La Borriquita” fue fundada en el año 2000 por un grupo de personas de profundas raíces cofrades. En 2001 se produciría la bendición de la imagen de Jesús montado en la borriquilla, y un año más tarde procesionaría por primera vez por las calles de Cantillana. No sería hasta el año 2009 cuando el paso de misterio completo realizara Estación de Penitencia.
Peñaflor y su «Borriquita»
Hay que remontarse a mediados de la década de los 90 del siglo pasado para ver los orígenes de esta Agrupación Parroquial cuando un grupo de jóvenes se reunieron ante la idea de formar una Hermandad de La Borriquita en Peñaflor. En 1996 se lanza la prupuesta y en 1997 se encarga la realización de la imagen de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén y la Virgen de los Ángeles en su Amargura.
Sin embargo, no sería hasta el año 2016 cuando el paso de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén recorriera las calles de Peñaflor en su paso de misterio. Un paso que también acoge a la imagen mariana titular, la Virgen de los Ángeles en su Amargura. En todo este periodo, una recreación viviente de Jesús subido a lomos de una borriquilla recorría las calles de la localidad en la mañana del Domingo de Ramos. Una costumbre, convertida ya en una arraigada tradición, que desde la Agrupación Parroquial no han querido perder.
Para este nuevo año sin pasos en la calle, la imagen de Jesús en la borriquita ocupa el altar mayor de la Iglesia de San Pedro Apóstol y presidirá por tanto, los cultos de este Domingo de Ramos que por la situación pandémica actual, se han ampliado también a este Sábado de Pasión.
