La Policía Local de Brenes acudió a un garaje de la localidad tras el aviso de los vecinos. Los agentes se encontraron a 10 personas que estaban celebrando una fiesta, incumpliendo de esta forma las medidas de prevención del coronavirus.
Un nuevo ejemplo de irresponsabilidad en medio de la pandemia de covid-19, pero que afortunadamente representa solo un caso aislado. Este pasado fin de semana, agentes de la Policía Local de Brenes se personaron en una cochera de la localidad tras la llamada de alerta de los vecinos ante las sospechas de estar realizándose una fiesta local por el escándalo y el alto volumen de la música que había en el interior de una vivienda.
Tras la llegada de los efectivos policiales hasta el lugar, hasta un total de 10 personas fueron desalojadas tras ser identificadas y sancionadas por incumplir las medidas anticovid, entre ellas el toque de queda, fijado por la Junta de Andalucía.
Según ha señalado el Ayuntamiento de Brenes, desde que comenzó la pandemia, la Policía Local ha interpuesto más de 200 multas por «infringir el Estado de Alarma» así como por el «incumplimiento de las medidas marcadas por las autoridades competentes en la gestión sanitaria».