La Guardia Civil ha detenido a un hombre que utilizó una finca en Cantillana para plantar marihuana entre las hileras de naranjos de una forma dispersa y disimulada, aprovechando las instalaciones de riego de los árboles.
Los agentes de la Benemérita llegaron hasta el lugar tras ser informados al respecto. El detenido, sin percatarse de la presencia de la Guardia Civil, le recriminó a un operario que estaba por la zona su cercanía a la plantación, al mismo tiempo que le lanzó amenazas para que no se entrometiera en sus asuntos. Por esta razón, el individuo fue identificado y detenido, acusado de un presunto delito contra la salud pública. A continuación fue puesto a disposición judicial en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Guardia de Lora del Río.
En el registro se hallaron 14 plantas de marihuana con un peso superior a los 77 kilos.
