La Asociación de Mujeres Cantillaneras, en colaboración con la Delegación de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Cantillana y la Obra Social de La Caixa ha repartido regalos a 52 niños y niñas de familias con pocos recursos de la localidad para que no pierdan la ilusión propia de esta fecha.
La solidaridad es otra vecina más de Cantillana. De esas de las que no hace falta llamar porque siempre está ahí. Solo basta una llamada para que se ponga manos a la obra. Y esas manos han sido, en esta ocasión, las de la Asociación de Mujeres Cantillaneras, que ha visto recompensado su trabajo incansable en sus más de 30 años con la alegría y satisfacción de ver la ilusión en la cara de los más pequeños al recibir los regalos. Una ilusión que no se quedó en un anhelado sueño, sino que se convirtió en realidad gracias a la solidaridad de estas mujeres cantillaneras.
Un gesto solidario que se ha visto materializado en un reparto de regalos a 52 niños y niñas de Cantillana que estas navidades tenían un poco más difícil el hacer realidad los deseos que habían escrito en sus cartas a Melchor, Gaspar y Baltasar. Esta muestra de generosidad, empatía y solidaridad ha sido posible gracias a la Asociación de Mujeres Cantillaneras junto a la Delegación de Participación Ciudadana, con una aportación de 1.000 euros para esta iniciativa, y la Obra Social La Caixa, que donó los regalos de 20 de los 52 niños.
El acto tuvo lugar el pasado día 23 de diciembre en el Centro Municipal López Cabrera, y contó con la participación de Pepe Retra y Emilio Picón, siempre dispuestos a arrimar el hombro cuando de ayudar a los demás se trata y más si tienen como misión encarnar a los emisarios de los Reyes Magos y que los ojillos de los niños y niñas brillasen de alegría e ilusión al recibir los regalos que previamente habían pedido en la carta dirigida a SS.MM de Oriente. Juguetes, balones, ropa… fueron algunos de los “sueños hecho realidad”.
Para Blanca Jiménez, presidenta de la Asociación de Mujeres Cantillaneras, ya destacaba en anteriores ediciones de este reparto de juguetes que la experiencia es “inolvidable”, porque “aunque haya supuesto mucho esfuerzo, la recompensa y la alegría ha sido muy grande, gratificante, maravillosa… y sobretodo, la increíble experiencia de ver la cara de ilusión de los niños y niñas”. Aunque en esta ocasión hayan llegado hasta 52 niños y niñas de Cantillana, la presidenta también señalaba que aunque no habían podido llegar a todas las solicitudes, “trabajaremos incansablemente para que el próximo año no se quede ninguno atrás”.
La solidaridad como bandera
La labor solidaria de la Asociación de Mujeres Cantillaneras no se queda solo en esta iniciativa, si no que va más allá. Durante el verano, estas mujeres también dan de comer durante el mes julio y parte de agosto a niños y niñas de familias con pocos recursos. Para ello, realizan un importante esfuerzo organizativo para conseguir a través de la Obra Social “La Caixa” y la Delegación de Bienestar Social del Ayuntamiento de Cantillana, los 7.500 euros que necesitan para sacar adelante esta bonita iniciativa con la que se beneficiaron 47 niños y niñas de la localidad.
En palabras de algunas de estas mujeres solidarias, esta iniciativa la pusieron en marcha “para que los más pequeños no notasen las dificultades por las que atravesaban sus familias”. Se trata, según apuntaban, de “un trabajo voluntario, sin pagar, de horas, con preocupaciones… pero que les reconforta con una enorme recompensa: la felicidad en la cara de los más pequeños”.
