El Ayuntamiento de la localidad ha aprobado, en el Pleno Municipal, no subir la totalidad de los impuestos y tasas municipales para el próximo año 2021, con los que las Ordenanzas Fiscales continúan vigentes en todas las posiciones tributarias. Esta medida ha sido aprobada con los votos a favor de los ediles del PSOE y Grupo Mixto y la abstención de IU.
El Equipo de Gobierno ha propuesto, además, consolidar todas las bonificaciones fiscales existentes, así como las medidas destinadas a facilitar el pago de las obligaciones tributarias, entre las que se incluyen las posibilidades de aplazamiento y fraccionamiento consensuadas con el Opaef para 2020.
La decisión de no aumentar la presión fiscal a familias y empresas afecta a todos los impuestos municipales, como el recibo de la contribución (IBI) o las liquidaciones de Vehículos, Plusvalías, Construcciones o el IAE (Impuesto de Actividades Económicas). También permanecen inalterables las aproximadamente 25 tasas municipales, entre las que se incluyen las sujetas a recientes revisiones de costes como las de cementerio o recogida de residuos, que no experimentarán incremento alguno en 2021. La posición fiscal será idéntica en las 7 ordenanzas reguladoras de precios públicos, como los del Patronato Municipal de Deportes, ayuda a domicilio o los relativos a oferta formativa y cultural.
“Las medidas planificadas tienen presente el impacto del Covid-19 en la economía y la evolución negativa asociada a la pandemia, la afectación observada en términos de producción y consumo en distintos sectores de actividad y la no menos relevante repercusión en términos de empleo”, informó la Delegación de Hacienda.
La edil del ramo, Raquel Vega, precisó que esta congelación supone “un notable esfuerzo en términos de contención fiscal para el Ayuntamiento de La Rinconada, teniendo en cuenta que para 2021 se estima un descenso continuado en la recaudación de ingresos municipales y/o provenientes del Estado y que, sin embargo, deberá fortalecerse el gasto público por prestaciones o programas directamente relacionados con el Covid-19”. “Esta factura no se repercutirá ni a vecinos ni a empresas”.
Para el alcalde, Javier Fernández, “es imperativo irrenunciable seguir manteniendo un Ayuntamiento sin déficit y con servicios públicos de calidad que se deben seguir prestando a la población sin mermas o recortes”. En cualquier caso, subrayó que “el Consistorio reorganizará su presupuesto en 2021 para que las familias de La Rinconada no tengan que asumir los costes del Covid-19 con nuevas subidas fiscales ni tampoco lo harán las empresas establecidas en el municipio ante el horizonte de incertidumbre existente”. Eso sí, desde la Delegación de Hacienda se ha precisado que “se debe descartar una bajada de impuestos porque en este nuevo escenario de crisis tenemos la obligación y la responsabilidad de sostener y garantizar unos servicios básicos y esenciales fuertes, elevando exponencialmente la política social y facilitando el dinamismo económico de La Rinconada desde una nueva estrategia pública inversora en la que ya trabajamos”.
Del mismo modo, “queremos facilitar la iniciativa privada generadora de empleo y actividad siendo un municipio atractivo también en términos fiscales y de gestión del territorio”. Y, sobre todo, “planificamos para no dejar de ser un Ayuntamiento motor, que vaya por delante de las demandas ciudadanas y que no pierda la capacidad de respuesta”, remarcó la edil de Hacienda. En estos meses, el Consistorio local ha tenido “un papel esencial en la labor de apoyo a familias, empresas y autónomos ante la crisis del Covid-19 que vamos a fortalecer en 2021”.
Antes del Pleno, en la Comisión de Participación Ciudadana, el tejido asociativo de la localidad, vinculado a sectores tan dispares como el deporte, la cultura, el medio ambiente, la formación o lo social, entre otros, respaldaba de forma unánime esta iniciativa.
