Tocina vive con esperanza un nuevo Lunes de Pentecostés

La Hermandad Filial del Rocío de Tocina ha organiado un acto de veneración y ofrenda de flores y alimentos al Simpecado, situado aún en el altar mayor de la Parroquia de San Vicente Mártir en este Lunes de Pentecostés tras presidirlo también durante el Solemne Triduo celebrado en honor de la Virgen del Rocío.

De nuevo, y por segunda vez, la Hermandad del Rocío de Tocina no ha peregrinado hasta la aldea de El Rocío para postrarse ante la Blanca Paloma. Aún así, los peregrinos sí han acudido a su llamada y se han postrado ante su Simpecado. Tampoco han podido encontrar alivio ante la mirada de la Virgen en el amanecer de este Lunes de Pentecostés, pero sí han podido sentirse aliviados ante su cara de marfil en esta mañana sin Rocío. Porque aunque la carreta de plata no haya hecho el camino ni cruzado el Vado del Quema, sí está presente por las calles de Tocina, recreando incluso la imagen de su salida desde la plaza de la iglesia. Y es que en este Rocío de Esperanza, es precisamente la esperanza de volver a echarse a los caminos y al encuentro de la Virgen del Rocío la que mueve el corazón de los rocieros de Tocina. Un pueblo que siempre camina prendido de su Simpecado como muestra de protección hacia sus hijos en el camino de la vida.

Al mediodía, a la hora en la que más o menos la Blanca Paloma habría vuelto hasta su ermita tras una intensa noche y esplendorosa mañana encontrándose con sus hijos, en Tocina repicaban jovialmente las campanas de la Parroquia de San Vicente Mártir. Una mezcla de sentimientos de añoranza y júbilo reinaba entre los hermanos, devotos y rocieros que se habían acercado hasta el templo para el rezo del Ángelus. Y Ella, que todo lo puede, tuvo hasta unos peregrinos muy especiales, que montados a lomos de sus caballos de madera y papel, rindieron pleitesía al bendito Simpecado, sembrando en ellos la semilla y fe rociera.

Rezo del Ángelus ante el Simpecado de la Hdad. del Rocío de Tocina en este Lunes de Pentecostés.
Acto de Veneración al Simpecado de la Hdad. de Ntra. Sra. del Rocío de Tocina.

Durante todo este Lunes de Pentecostés, la Hermandad Filial del Rocío de Tocina ha tenido a bien organizar un acto de veneración a su Simpecado, además de una ofrenda floral y de alimentos. A la caída de la tarde, y tras el rezo del Santo Rosario y la Eucaristía de Pentecostés, la hermandad iniciará su «camino de vuelta» con el traslado del Simpecado hasta su capilla.

Para Carlos Ramírez, hermano mayor de la Hermandad de Ntra. Sra. del Rocío de Tocina, la imposibilidad de peregrinar hasta la aldea y postrarse ante la Señora por segundo año consecutivo a consecuencia de la pandemia de coronavirus, es siempre «motivo de tristeza». Pero a pesar de ello, ha querido destacar como esta situación sobrevenida ha servido para «hacer más hermandad», trasladando un sentimiento de «gran agradecimiento por la respuesta de los devotos y peregrinos de Tocina a los actos de culto y actividades que hemos organizado», destacando así como «las circunstancias han servido para llegar a más devotos y vecinos» de la localidad, consiguiendo con ello «que el sentimiento rociero sea más grande en nuestro pueblo».

El hermano mayor también ha querido lanzar un mensaje de esperanza a todos sus hermanos, subrayando que «en unas circunstancias u otras» y observando como ha evolucionado la pandemia, «el próximo año sí estaremos ante la Virgen del Rocío, haremos el camino y nos postraremos ante Ella», pudiendo ser «distinto a lo que hemos conocido hasta ahora», pero lo que «siempre será igual será el amor y la fe hacia la Virgen del Rocío»

Simpecado de la Hermandad de Ntra. Sra. del Rocío de Tocina.

Un camino solidario hasta El Rocío

Uno de los pilares más importantes de la Hermandad del Rocío del Tocina es la caridad hacia sus hermanos. Por ello, son múltiples las iniciativas y actividades que llevan a cabo durante todo el año como muestra de amor hacia el prójimo. Este año, y tras no poder realizar el camino hasta la aldea, la hermandad puso en marcha la actividad «Pisadas Solidarias», en la que se apelaba a la solidaridad de los hermanos, devotos y fieles con la donación de 10 euros, que se traducirían en 1.000 pasos para realizar una peregrinación virtual hasta El Rocío. La respuesta «extraordinaria», como la calificaba el hermano mayor, Carlos Ramírez, ha permitido hacer todo el camino de ida y vuelta de la hermandad. Los beneficios económicos obtenidos irán destinados a la ONG «Movimiento de Ayudas a las Misiones», fundada por el Padre Miguel Benítez, misionero de Tocina fallecido en 2007 en Brasil.

Parte de la ofrenda de alimentos realizada por los devotos rocieros de Tocina.

Durante la jornada de hoy, la hermandad también ha organizado una ofrenda de alimentos que irán destinados a Cáritas para satisfacer las necesidades de los vecinos más desfavorecidos de la localidad. Además, y desde hace ya algunos años, puso en marcha la campaña «Ningún niño sin vacuna», con la intención de que ningún niño o niña de las familias más desfavorecidas de Tocina se quede sin recibir las correspondientes vacunas.

Un futuro cargado de proyectos

Si el año pasado quedaba finalizada la Casa Hermandad de Tocina en la aldea, uno de los proyectos más importantes que tienen ahora por delante es la reforma integral de la casa hermandad en la localidad. Un proyecto grande pero que «gracias al compromiso de los hermanos, no dudamos en que lo vamos a lograr», señala Carlos Ramírez. Además, durante los cultos celebrados esta pasada semana en honor a la Blanca Paloma, también se ha estrenado el nuevo estandarte de la hermandad, bordado en oro sobre terciopelo burdeos y realizado por Antonio Roldán.

Además de estos proyectos y estrenos materiales, la hermandad también ha querido cuidar y salvaguardar su patrimonio inmaterial con la concesión anual del «Simpecado de Plata» a aquellas personas, asociaciones o colectivos que han contribuido de forma decidida por el bien de la hermandad. Por ello, y según señalaba el hermano mayor, Carlos Ramírez, «hemos querido que el primer «Simpecado de Plata» sea para el primer hermano mayor que tuvo nuestra hermandad, y al que en lugar de plata, le hemos concedido el «Simpecado de Oro».

Medalla del oro de Tocina concedida al Hdad. de Ntra. Sra. del Rocío de Tocina.

Con romería o sin ella, Tocina siempre está con la Virgen del Rocío. Porque el sentimiento rociero no entiende de virus ni de pandemias. Todo pasará, pero la fe del peregrino perdurará. Porque una medalla, además de contar caminos, promesas y rogativas, también le sirve al hermano de alivio y baúl de otros muchos momentos y recuerdos especiales en el amor hacia Blanca Paloma.

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